Articulo de Cuentos de Aventura para Niños sobre La abeja reina
Saber mas sobre La abeja reina
Un rey tenía múltiples hijos, de los que 2 de ellos deseaban ir de aventura por el ancho planeta. Un día no llegaban a palacio y el rey mandó a Simpletón, otro de sus hijos, este inmediatamente se puso a procurarlos y cuando los halló, se burlaban de el por el hecho de que lo consideraban menos inteligente.
Por fin decidieron irse los 3 juntos a proseguir descubriendo los placeres del planeta, hasta el momento en que llegaron a un nido de hormigas. Cuando los hermanos desearon incordiar a las hormigas Simpletón no se los dejó y les dijo:
-Dejen de molestarlas.
Prosiguieron su camino y se hallaron con 2 patos que nadaban en una laguna, los hermanos deseaban asarlas y comerlas, mas Simpletón les afirmó una vez mas:
-No dejaré que las maten, dejen esas criaturas en paz.
Prosiguieron su viaje y después los hermanos hallaron un panal de abejas, para comer la miel deseaban abrasar el árbol, mas Simpletón les dijo:
-No dejaré que quemen las abejas, déjenlas en paz.
Prosiguieron su camino y llegaron a un castillo donde la única persona que hallaron fue un pequeño hombre gris, quien les invito de comer hasta la saciedad y los dejo dormir esa noche. Por la mañana siguiente les aguardaban 3 labores. Debían lograr en el bosque las mil perlas que eran de una de las princesas, si al procurarlas faltaba una de las perlas, esa persona se haría de piedra como el resto. La idea era romper el encanto a la que se vieron sometidos todos en palacio.
Cada uno de ellos de los hermanos busco y busco mas ninguno tuvo éxito y se transformaron en hombres de piedra. Cuando le toco el turno a Simpletón, no conseguía unir las perlas por su lentitud, y rompió en lloro. Mas las hormiguitas a quienes salvo, en un momento se pusieron a trabajar y juntaron todas y cada una de las perlas.
Mas la segunda labor, era sacar la llave del dormitorio de la princesa que estaba en el lago, esa vez fueron los patos quienes lo asistieron.
Y el tercero era pero complicado, había que reconocer a la hija menor de las 3 hijas del rey. Había que reconocerla por la miel que probo ya antes que durmiesen, eran muy similares físicamente con lo que las abejas la reconocieron por el sabor a miel, al posarse en sus labios. Solo de esta forma termino el hechizo y todo volvió a la normalidad.
Simpletón se caso con la menor de las hijas y él fue el rey, sus hermanos se casaron pronto con las hermanas y fueron mejores personas.