Articulo de Cuentos Muy Cortos para Niños sobre El sapo y la flor vanidosa
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Érase una tarde de primavera que un sapo cansadísimo de tanto saltar, al fin llegó a un jardín en el que se detuvo un rato a tomar agua y sol. De repente, al ver una bella flor , se quedó perplejo puesto que jamás había visto tanta belleza en su corta vida. El sapo no pudo contener tanta admiración y le afirmó a la flor lo singular y preciosa que era, mas la desagradecida flor en vez de dar las gracias tan afable ademán, respondió de malísima gana y afirmó que desgraciadamente no podía decirle lo mismo por el hecho de que el sapo era muy, mas feísimo. ¡vete de acá! , le afirmó la flor . El sapo realmente triste se fue saltando en pos de otro sitio en donde reposar.
Ese día al anochecer, comenzó a llover y poquito a poco comenzó a ponerse el tiempo feísimo. Llegaron vientos huracanados, destruyéndolo todo y perdiendo de esta manera la flor, su belleza. Quedó muy maltratada, sin hojas y feísima la malagradecida flor . Tras un tiempo cuando pasaba el sapo otra vez por el jardín donde vivía la flor, la vio y sorprendido dijo: La apariencia no es lo pero esencial, con el tiempo la belleza asimismo se termina. Mas si me dejas quedarme en el jardín yo con mucho gusto puedo cuidar a ti. La flor admitió y reconociendo que había tratado muy mal al sapo y arrepentida de ahí que, tuvo el valor de solicitarle excusas. De allá de ahora en adelante fueron los mejores y también inseparables amigos del jardín y cuando hay una tormenta, el sapo trae hojas para cubrir a la flor.
