Los siete cuervos

Articulo de Cuentos Clásicos para Niños sobre Los siete cuervos

Los siete cuervos

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Hubo una vez un hombre que tuvo 7 hijos varones, se sentía muy feliz con ellos, mas deseaba en el fondo de su corazón una pequeña. Cuando llego la feliz nueva que tendría una pequeña, la alegría desbordaba su corazón.
La pequeña nació muy enclenque, de ahí que decidieron sus progenitores bautizarla en su casa. Uno de sus hijos fue a traer agua del pozo y lo hizo acompañado de sus hermanos, todos deseaban completar el jarro y en el forcejeo se les cayo al pozo. Como tardaban mucho, el padre enojado fue a procurarlos, puesto que temía que su pequeña empeore ya antes de su bautizo.
A raíz de tanta ira, deseo que sus hijos se transformen en unos cuervos y de este modo sucedió. El padre vio de forma inmediata volar y salir de su casa siete cuervos, quedándose solo con su hija. La pequeña medró sana y se hizo realmente bonita, mas pronto la gente le hizo saber que era la encargada de haber perdido a sus hermanos.
Cuando la hija hizo preguntas a sus progenitores, le afirmaron que nada de lo que oyó era cierto, y que lo sucedido fue a raíz de la voluntad divina, mas la joven se fue de casa a buscar a sus hermanos solo con lo preciso para comer y tomar, pero algo de abrigo. La pequeña camino mucho sin ver por donde y llego hasta el fin del planeta, se halló con el sol caliente, y para no quemarse debió irse lejísimos hasta el momento en que llego a la luna que era algo desalmada, allá el frío era muy helado y asimismo se alejo.
Cuando llego hasta las estrellas se sintió a gusto con ellas, estaban todas y cada una fijas en un mismo punto y una de ellas le dijo:
-Este hueso de pollo será la llave que va a abrir la montaña de cristal donde están tus hermanos, debes tenerla y cuidarla bien. Cuando la hermana llego se dio cuenta que había perdido el hueso, entonces por sus hermanos se corto un dedo y abrió la puerta. Allá se halló con un enano que le dijo:
-¿Qué buscas pequeña?
-A mis hermanos los cuervos.
-Ellos no están.
Y el enano se dispuso a servir siete platos de comida y siete vasos de agua pequeñísimos. Ella tomó y comió poquísimo de cada porción, y dejo caer el anillo de sus progenitores en el último vaso. Cuando llegaron sus hermanos los cuervos el último noto el anillo de sus progenitores y se dio cuenta de la presencia de su hermano, entonces dijo:
-Nuestra hermana ha llegado y ahora por fin vamos a ser libres, al escuchar esto entro la hermana y todos se dieron un fuerte abrazo y juntos retornaron al hogar con sus amados progenitores.