La tortuga Tina

Articulo de Otros Cuentos sobre La tortuga Tina

La tortuga Tina

Saber mas sobre La tortuga Tina

En un sitio lejano había una tortuga llamada Tina , esta tortuga estaba realmente triste por el hecho de que cuando eran las carreras de la urbe jamás lograba ganar debido a su lentitud.
Tina decía:
– Jamás voy a poder ganar la medalla olímpica por el hecho de que no puedo correr más de lo que lo intento, en cambio las liebres y los otros animales siempre y en todo momento tienen mayor velocidad y me ganan anualmente.
El resto animales se reían de ella diciéndole:
– A fin de que te presentas eres demasiado lenta para ganar, déjanos la medalla a nosotros y resígnate a perder.
La tortuga Tina se puso a plañir y dijo:
– Llevan razón no puedo ganar, no se a fin de que me presento si jamás voy a poder correr tanto como , va a ser una pérdida de tiempo y de dignidad, pues se van a reír de mí de nuevo por perder la carrera.
El Caracol Simón:
Entonces llegó el caracol Simón y le afirmó, tortuga jamás creí que fueras tan enclenque, cada año me presento junto a ti, soy el que siempre y en todo momento esta junto a ti, soy lento, mas jamás me rindo, por el hecho de que la batalla se pierde cuando no se lucha.
La tortuga Tina , lo miró con los ojos bien abiertos, y le dijo:
– Y que podría hacer?? Jamás voy a ser tan veloz.
El caracol le sugirió que si los 2 iban juntos y ponían fuerzas podrían llegar más veloz al sitio y que si bien no ganaran podrían llegar a un puesto mejor que el año pasado.
La tortuga Tina , asintió y afirmó que le parecía bien la idea.
La próxima mañana los dos se estrecharon la mano y empezó la carrera… tres con dos.. Yaaaa!!
Empezaron todos a correr mientras que se burlaban de ellos, por su parte iban a su ritmo lento mas con mucha pero fuerza…
Cuando estaban por venir a la meta, la liebre en un intento de mofa tropezó con una piedra y cayó encima de todos los demás animales de carrera, tal y como si fueran un dominó.

La tortuga Tina y el caracol Simón, se miraron con una enorme sonrisa y pusieron su fuerza por venir a la meta, y de este modo fue como ganaron la carrera, se llevaron la medalla, y pudo comprender la tortuga Tina que la batalla que no se gana es la que no se procura por temor a fallar.